Parte I
¡Hablame! Que tu voz, eco del cielo,
sobre la tierra por doquier me siga...
con tal de oir tu voz, nada me importa
que el desdén en tu labio me maldiga.
¡Mírame!... Tus miradas me quemaron,
y tengo sed de ese mirar, eterno...
por ver tus ojos, que se abrase mi alma
de esa mirada en el celeste infierno.
¡Amame!... Nada soy... pero tu diestra
sobre mi frente pálida un instante,
puede hacer del esclavo arrodillado
el hombre rey de corazón gigante.
8 Comments:
Que foto má bella que has publicado. Si tuviera que quedarme con una escena, sería esta. Es quizá la única vez, que Ennis abandona su hermetismo y deja su corazón desbordar de ternura. Le susurra una canción de cuna, y lo mece entre sus brazos. Y Jack, sus bellos ojos cerrados, dichoso,tal vez pensando como tú dices: Tú blanca diestra en mi frente, puede hacer un rey de un esclavo.
¡Dios!, pero que bellos ojos tiene este chico, aún cerrados son hermosos.
Un beso
suspiros....
Qué belleza Mar, cómo me gusta como escribes. Ese instante, ese momento... debería haber sido eterno porque era tan perfecto...
Ayyy, qué lindo poema, me parece ver a Ennis en su remolque, acariciando las camisas, mirando la postal y pensando justamente lo que dicen aquellos versos...qué lindo Mar!!!!
Estoy de acuerdo con Rosadefuego, la foto está espectacular, es una imagen muy común (me refiero a que las imágenes del flashback son de las que más circulan) , pero está tomada desde un ángulo diferente y eso la hace tan, pero tan especial...
Besitos Mar y gracias!
...ay que hermosura... me matas, Mar querido...
Un regalo para la vista y un pálpito en el corazón.
Ay Dios...
seguimos con las pinceladas de poesia y belleza que nos trae el mar del Norte... muchisimas gracias Mar.
Por dios niña....
Jo. Que bonito...
Me dejas sin palabras.
Publicar un comentario
<< Home